
¿Y si te dijera que las mujeres aún tienen que trabajar más… para ganar menos?
Dos Mujeres Ph.D. en estadística de la @Universidad de Salamanca— publicaron en 2021 un estudio revelador sobre la autonomía económica de las mujeres en América Latina.
@CENES Analizaron indicadores de empleo en 15 países para visibilizar una realidad urgente: las brechas de género persisten… y se profundizan.
5 hallazgos que deberían estar en el radar de toda persona que lidere, legisle o
eduque:
1. Ingreso propio desigual
En todos los países analizados, las mujeres tienen menos ingresos que los hombres.
En Guatemala, más del 50% de las mujeres no tiene ingresos propios.
2. Doble jornada: la carga no remunerada
Ellas dedican hasta 54 horas semanales a trabajo doméstico y de cuidado, mientras
los hombres rara vez superan las 20 horas. Un costo invisible para su desarrollo
económico.
3. Segregación productiva
El 78.5% de las mujeres están empleadas en sectores de baja productividad. Solo un 8%
accede a sectores de alta productividad.
4. ¿Dónde están las mejores condiciones?
Países como Uruguay, Colombia, Costa Rica y Brasil lideran en oportunidades para el
empleo femenino en sectores de mayor calidad.
5. No es solo cultura. Es estructura.
La informalidad, la economía del cuidado y la falta de políticas públicas con enfoque de
género bloquean el empoderamiento económico femenino.
Esta investigación pone datos duros a lo que muchas mujeres viven cada día:
desigualdad en ingresos, oportunidades y tiempo.